No todos los psicólogos hacen el mismo tipo de terapia. La Terapia Cognitivo Conductual es, en primer lugar, una forma de tratamiento psicológico. Pero no es una forma más de tratamiento, la Terapia Cognitivo Conductual es el tratamiento psicológico con mayor efectividad científicamente comprobada. Aquí vamos a contarte cómo es y en qué consiste este tipo de terapia.
Las etapas de una terapia cognitivo conductual:
La evaluación:
En esta etapa el terapeuta busca conocer al paciente, comprender los problemas por los que llegó a la consulta. En esta etapa tratará de llegar a un diagnóstico, conversando con el paciente y transmitiéndole lo que va hallando. A su vez, el paciente empieza a conocer y comprender más sobre su problema y sus características.
Importante: durante esta etapa el terapeuta y el paciente conversan y acuerdan qué objetivos tendrá el tratamiento y cuáles serán las prioridades.
Esta etapa suele durar entre 3 y 5 sesiones.
El tratamiento:
Es la etapa más larga, el tratamiento propiamente dicho. Los terapeutas cognitivo conductuales cuentan con todo un abanico de herramientas; éstas se utilizan de acuerdo a los problemas que se descubrieron junto al paciente en la etapa anterior. Hay técnicas puntuales para problemas distintos, como por ejemplo la depresión, las fobias, el estrés, etc. También hay técnicas distintas para cada fase del tratamiento. Lo importante es que se mantiene siempre un diálogo sobre los objetivos planteados antes y el modo en que estas herramientas nos acercan a alcanzarlos.
La duración de un tratamiento de terapia cognitivo conductual depende de muchos factores, pero los principales son dos:
- El diagnóstico:
Hay problemas cuya solución es más rápida y sencilla. - El compromiso del paciente:
En esta forma de tratamiento se le suele dar al paciente ejercicios y tareas para hacer entre sesión y sesión. Cuanto más se dedique el paciente, más rápidamente se alcanzarán los objetivos.
Las herramientas técnicas de la Terapia Cognitivo Conductual tienen una base científica. Sus procedimientos han sido investigados, revisados y actualizados durante varias décadas. El terapeuta cognitivo conductual aplica técnicas que han probado su eficacia para cada problema. Esto no las vuelve infalibles, pero la investigación científica y rigurosa sí nos permite afirmar que en la mayoría de los casos son muy eficaces.
El seguimiento:
Durante esta etapa las sesiones se van espaciando, son menos frecuentes. Los objetivos se van alcanzando y es momento de asegurarse de que los logros van a mantenerse en el tiempo, previniendo recaídas. Cuando los objetivos se alcanzaron y los cambios se han consolidado, el paciente es dado de alta como en cualquier otro tratamiento de salud.
La Terapia Cognitivo Conductual tiene un final, un alta, exceptuando los casos de patologías crónicas. No tenemos terapias de varios años de duración. Exceptuando los casos graves o crónicos, es raro que un tratamiento psicológico se extienda mucho más que un año y casi siempre duran menos de dos años.
Otras características importantes de la Terapia Cognitivo Conductual:
La Terapia Cognitivo Conductual es práctica y trabaja por objetivos
En Terapia Cognitivo Conductual nos concentramos en resolver los problemas actuales de la persona, los motivos que la aquejan hoy y la hacen sufrir. En algunos casos, cuando es necesario para entender el problema actual, preguntamos información sobre el pasado; pero el acento del tratamiento está puesto en resolver las dificultades de hoy.
Los diálogos entre el paciente y el terapeuta están guiados por objetivos prácticos. No se trata para nada de una charla espontánea sin dirección, sino que nos orientamos por los motivos que al paciente lo trajeron al tratamiento.
En Terapia Cognitivo Conductual no nos limitamos a charlar entre terapeuta y paciente. Enseñamos al paciente un conjunto de ejercicios que lo van a ayudar a manejar y resolver los problemas. Le damos herramientas que lo ayudan no sólo a mejorar sino a mantenerse bien una vez concluido el tratamiento.
En la Terapia Cognitivo Conductual el psicólogo interviene activamente
El terapeuta cognitivo conductual es activo. ¿Qué quiere decir esto? Que pregunta, contesta, sugiere, explica; en definitiva, ayuda al paciente a comprender y a actuar. Para un terapeuta cognitivo conductual el paciente llega con un sufrimiento que no ha podido resolver por sus propios medios. El terapeuta cognitivo conductual posee conocimientos científicos sobre qué hacer para aliviar el padecimiento y los usa, los aplica con el paciente que se lo está pidiendo, le da las herramientas para superar su problema y estar mejor.
Precisamente el terapeuta cognitivo conductual no permanece callado, con actitud misteriosa, no se mantiene distante ni como un desconocido. Al contrario, fomentamos un vínculo humano de confianza y afectuoso dentro de los límites de la relación terapéutica.
La Terapia Cognitivo Conductual permite abordar todos los problemas psicológicos
Todos los problemas psicológicos pueden ser tratados con Terapia Cognitivo Conductual. En algunos da mejores y más rápidos resultados, pero puede aplicarse a todos.
- Es muy efectiva para el tratamiento de la ansiedad, depresión, estrés, enojo, incluso disfunciones sexuales.
- Es moderadamente efectiva para los problemas de impulsos, como el juego patológico, los atracones y las adicciones.
- Es menos efectiva para casos más graves como la esquizofrenia. Hay problemas que ninguna forma de terapia ha logrado resolver completamente, y la esquizofrenia es uno de ellos. Pero aunque no la cure, la Terapia Cognitivo Conductual puede ofrecer tratamientos que mejoran mucho la calidad de vida del paciente y su familia.
Es importante enfatizar que la Terapia Cognitivo Conductual, aun en los casos en que es poco efectiva, sigue resultando más efectiva en comparación con otras formas de terapia psicológica.
Que un problema no tenga cura no significa que no tenga un tratamiento, ya que si no se cura, se alivia. En estos casos, el tratamiento se complementa con un abordaje psiquiátrico para obtener los máximos resultados posibles.